Es así de sencillo: la riqueza, la realización personal, están al alcance de todas aquellas personas que lo desean; basta simplemente con desvelar un secreto, el secreto del éxito. Y para ello sencillamente hay que querer, estar dispuesto a desvelarlo.
Napoleón Hill aprendió del famoso industrial, filántropo y escritor Dale Carnegie este secreto del éxito. Él lo que hizo —y resulta una tarea importante— es, primero, sistematizarlo; después, hacerlo accesible a cualquier persona de cualquier clase social.
Piense y hágase rico es una obra diseñada para arrastrar al triunfo, entendido no sólo como triunfo económico, sino, sobre todo, como logro de esta íntima satisfacción que permite el equilibrio personal y que significa la base de las empresas más comprometidas y más deseadas.
Napoleón Hill es en la actualidad el autor de autoayuda y superación más prestigioso de todo el mundo. Gracias a él y a sus aleccionadoras palabras, cientos de miles de personas corrientes se han sentido motivadas para convertirse en supermillonarias. Ha sido asesor de varios presidentes de los Estados Unidos.